He humillado a muchos,
Mi fin:
El cambio.
Cargo tantos muertos,
Tantos odios me odian…
Que a los que salvé:
Ignoro.
Solo:
Mi destino.
Me cauterizan,
Me escupen la cara,
Echan ceniza a mi recuerdo.
Sí,
Mi amor es infinito.
Ricardo Marcenaro
17 de agosto de 2009