Maurice Andrè - Adagio Albinoni
Maurice André (May 21, 1933 – February 25, 2012) was a French trumpeter, active in the classical music field.
Biography
André was born in Alès in the Cévennes, into a mining family. His father was an amateur musician. André studied trumpet with a friend of his father's, who suggested that André be sent to the conservatory. In order to gain free admission to the conservatory, he joined a military band. After only six months at the conservatory, he won his first prize.
At the conservatory, André's professor beat him out of frustration and told him to return when he could excel in his playing. A few weeks later, he returned to play all fourteen etudes found in the back of the Arban's book without a single mistake.[1]Maurice André won the Geneva International Music Competition in 1955 and the ARD International Music Competition in Munich in 1963. He was made an honorary member of the Delta chapter of Phi Mu Alpha Sinfonia at Ithaca College in New York in 1970.
André rose to international prominence in the 1960s and 1970s with a large series of recordings of Baroque works on piccolo trumpet for Erato and other labels. Not content to limit himself to the standard Baroque trumpet repertoire, André also performed many transcriptions of works for oboe, flute, and even voice and string instruments. These recordings were (and remain) very popular, and were a strong component of the rebirth of interest in Baroque music in the 1960s. André had over 300 audio recordings to his name, from the mid 1950s to his death.
He had two children: Nicolas, who plays the trumpet; and Béatrice, who plays the oboe. Both performed with their father in concert.
One of André's students, Guy Touvron wrote a biography on him entitled Maurice André: Une trompette pour la renommée (Maurice André: A Trumpet for Fame), which was published in 2003.[2]
André spent the last few years of his life in retirement in the southern part of France. He died at the age of 78 in a hospital in Bayonne on February 25, 2012.[3] He is buried in the cemetery of the village of Saint-André-Capcèze (in the Lozère)
Biography
André was born in Alès in the Cévennes, into a mining family. His father was an amateur musician. André studied trumpet with a friend of his father's, who suggested that André be sent to the conservatory. In order to gain free admission to the conservatory, he joined a military band. After only six months at the conservatory, he won his first prize.
At the conservatory, André's professor beat him out of frustration and told him to return when he could excel in his playing. A few weeks later, he returned to play all fourteen etudes found in the back of the Arban's book without a single mistake.[1]Maurice André won the Geneva International Music Competition in 1955 and the ARD International Music Competition in Munich in 1963. He was made an honorary member of the Delta chapter of Phi Mu Alpha Sinfonia at Ithaca College in New York in 1970.
André rose to international prominence in the 1960s and 1970s with a large series of recordings of Baroque works on piccolo trumpet for Erato and other labels. Not content to limit himself to the standard Baroque trumpet repertoire, André also performed many transcriptions of works for oboe, flute, and even voice and string instruments. These recordings were (and remain) very popular, and were a strong component of the rebirth of interest in Baroque music in the 1960s. André had over 300 audio recordings to his name, from the mid 1950s to his death.
He had two children: Nicolas, who plays the trumpet; and Béatrice, who plays the oboe. Both performed with their father in concert.
One of André's students, Guy Touvron wrote a biography on him entitled Maurice André: Une trompette pour la renommée (Maurice André: A Trumpet for Fame), which was published in 2003.[2]
André spent the last few years of his life in retirement in the southern part of France. He died at the age of 78 in a hospital in Bayonne on February 25, 2012.[3] He is buried in the cemetery of the village of Saint-André-Capcèze (in the Lozère)
Maurice André - Carnaval of Venice (Arban)
Music: Maurice Andre - Adagio Albinoni - Carnaval of Venice (Arban) - Bio Data in English y Español
Maurice André (21 de mayo de 1933 - 25 de febrero de 2012)1 fue un trompetista francés, nacido en Alès, una población con tradición minera del sur de Francia. Algunos profesionales de la trompeta lo consideran el mejor trompetista de los últimos tiempos.[cita requerida]
Es posible que muy poca gente tenga conciencia de hasta qué punto constituyó una novedad o una insólita rareza que un trompetista destacase en una sala de conciertos. Después de la Segunda Guerra Mundial, un virtuoso de la trompeta debía promocionarse forzosamente en campos de la música ligera o del jazz, toda vez que este noble instrumento carecía de un repertorio clásico suficientemente amplio como para nutrir una vocación de solista. Tanto el auge de la música barroca como el desarrollo de la industria fonográfica vino a completar un tanto esta carencia; aunque todo ello hubiera sido imposible de no haber existido instrumentistas de contrastada calidad y dispuestos a elevar la trompeta al mismo nivel que el resto de instrumentos solistas de la orquesta. El pionero de todos ellos fue Maurice André.
Maurice André nació en Alès, cerca de Nîmes, el 21 de mayo de 1933, en el seno de una familia trabajadora en la cuenca minera del río Gard. El padre de Maurice tocaba la trompeta en sus ratos libres en la banda del pueblo, con lo que el pequeño Maurice se aficionó y acostumbró al peculiar timbre de este instrumento desde su más tierna infancia. Si bien a los catorce años Maurice también comenzó a trabajar en la mina, alternó dicha labor con las clases de música que le dio su primer profesor, monsieur Barthélémy, un trompetista que se había graduado en París y que volvió a su pueblo ante la falta de oportunidades en la capital francesa. En 1951, y siguiendo los consejos de su profesor, André empezó a estudiar con Raimond Sabarich, profesor de trompeta y corneta en el Conservatorio de París, quien consiguió que un año después su alumno fuese admitido en el citado Conservatorio. Allí, André se inició en el estudio del cornetín, un instrumento en plena decadencia pero fundamental y necesario para la iniciación de los futuros trompetistas. André se resolvió como un magnífico estudiante y ya en el primer año consiguió el Premier Prix del Conservatorio en cornetín, galardón que revalidaría al año siguiente en la especialidad de trompeta.
Antes de promocionarse como solista, André se vio obligado a colaborar como trompetista en algunas de las mejores orquestas de París. Así, en 1953 (Con sólo 20 años) y por un espacio de ocho años, fue contratado como trompeta solista de la Orquesta Filarmónica de la Radio Televisión Francesa, aunque también colaboró para la prestigiosa Orquesta de los Conciertos Lamoureux. En 1955 ganó el primer premio del Concurso Internacional de Ginebra y graba sus primeros discos de música barroca. En 1962 es nombrado profesor de trompeta en el Conservatorio de París y un año más tarde logra el primer premio en el prestigioso Concurso de Munich, hecho determinante que le impulsó a una reconocida carrera internacional y a la grabación de muchos discos. Efectivamente, a partir de 1963 André empieza a promocionarse en giras de conciertos, principalmente en Alemania, donde es requerido por directores de la talla de Herbert von Karajan, Karl Böhm o Karl Richter. Pero también es solicitado por las mejores formaciones del resto de Europa, de la URSS, de Norteamérica y Japón, con lo que su nombre empieza a ser mundialmente reconocido como el del trompetista más importante de su tiempo. También desde aquellos años, inicia una puntual colaboración con las organistas Marie-Claire Alain y Hedwig Bilgram (La conjunción entre trompeta y órgano desarrolla una sonoridad óptima para el repertorio, ya sea barroco o más moderno). Desde entonces, Maurice André ha venido desarrollando una exitosa trayectoria basada una triple vía en la que se conjugan los conciertos y recitales, la pedagogía y la difusión del instrumento
Este estilo, que André identificó con la Escuela Francesa, suscitó la creación por sus discípulos de una serie de «filiales» en el extranjero seguidoras de este estilo musical. Entre ellas se encuentra la Escuela Española, que atraviesa un período de expansión gracias al trabajo que cuenta ya con unas cuantas décadas de actividad, desarrollado por los precursores de dicha actividad. Entre ellos figuran antiguos alumnos de André que estudiaron en el Conservatorio de París y que hoy son responsables de los conservatorios más importantes en España.[cita requerida]
En sus últimos años estuvo prácticamente retirado, aunque aún realizaba algunas actividades relacionadas con la trompeta como seminarios y cursos magistrales, dentro de los límites que le permitía su delicado estado de salud.
Maurice André falleció en Urrugne, Francia, el 25 de febrero de 2012.
Es posible que muy poca gente tenga conciencia de hasta qué punto constituyó una novedad o una insólita rareza que un trompetista destacase en una sala de conciertos. Después de la Segunda Guerra Mundial, un virtuoso de la trompeta debía promocionarse forzosamente en campos de la música ligera o del jazz, toda vez que este noble instrumento carecía de un repertorio clásico suficientemente amplio como para nutrir una vocación de solista. Tanto el auge de la música barroca como el desarrollo de la industria fonográfica vino a completar un tanto esta carencia; aunque todo ello hubiera sido imposible de no haber existido instrumentistas de contrastada calidad y dispuestos a elevar la trompeta al mismo nivel que el resto de instrumentos solistas de la orquesta. El pionero de todos ellos fue Maurice André.
Maurice André nació en Alès, cerca de Nîmes, el 21 de mayo de 1933, en el seno de una familia trabajadora en la cuenca minera del río Gard. El padre de Maurice tocaba la trompeta en sus ratos libres en la banda del pueblo, con lo que el pequeño Maurice se aficionó y acostumbró al peculiar timbre de este instrumento desde su más tierna infancia. Si bien a los catorce años Maurice también comenzó a trabajar en la mina, alternó dicha labor con las clases de música que le dio su primer profesor, monsieur Barthélémy, un trompetista que se había graduado en París y que volvió a su pueblo ante la falta de oportunidades en la capital francesa. En 1951, y siguiendo los consejos de su profesor, André empezó a estudiar con Raimond Sabarich, profesor de trompeta y corneta en el Conservatorio de París, quien consiguió que un año después su alumno fuese admitido en el citado Conservatorio. Allí, André se inició en el estudio del cornetín, un instrumento en plena decadencia pero fundamental y necesario para la iniciación de los futuros trompetistas. André se resolvió como un magnífico estudiante y ya en el primer año consiguió el Premier Prix del Conservatorio en cornetín, galardón que revalidaría al año siguiente en la especialidad de trompeta.
Antes de promocionarse como solista, André se vio obligado a colaborar como trompetista en algunas de las mejores orquestas de París. Así, en 1953 (Con sólo 20 años) y por un espacio de ocho años, fue contratado como trompeta solista de la Orquesta Filarmónica de la Radio Televisión Francesa, aunque también colaboró para la prestigiosa Orquesta de los Conciertos Lamoureux. En 1955 ganó el primer premio del Concurso Internacional de Ginebra y graba sus primeros discos de música barroca. En 1962 es nombrado profesor de trompeta en el Conservatorio de París y un año más tarde logra el primer premio en el prestigioso Concurso de Munich, hecho determinante que le impulsó a una reconocida carrera internacional y a la grabación de muchos discos. Efectivamente, a partir de 1963 André empieza a promocionarse en giras de conciertos, principalmente en Alemania, donde es requerido por directores de la talla de Herbert von Karajan, Karl Böhm o Karl Richter. Pero también es solicitado por las mejores formaciones del resto de Europa, de la URSS, de Norteamérica y Japón, con lo que su nombre empieza a ser mundialmente reconocido como el del trompetista más importante de su tiempo. También desde aquellos años, inicia una puntual colaboración con las organistas Marie-Claire Alain y Hedwig Bilgram (La conjunción entre trompeta y órgano desarrolla una sonoridad óptima para el repertorio, ya sea barroco o más moderno). Desde entonces, Maurice André ha venido desarrollando una exitosa trayectoria basada una triple vía en la que se conjugan los conciertos y recitales, la pedagogía y la difusión del instrumento
Este estilo, que André identificó con la Escuela Francesa, suscitó la creación por sus discípulos de una serie de «filiales» en el extranjero seguidoras de este estilo musical. Entre ellas se encuentra la Escuela Española, que atraviesa un período de expansión gracias al trabajo que cuenta ya con unas cuantas décadas de actividad, desarrollado por los precursores de dicha actividad. Entre ellos figuran antiguos alumnos de André que estudiaron en el Conservatorio de París y que hoy son responsables de los conservatorios más importantes en España.[cita requerida]
En sus últimos años estuvo prácticamente retirado, aunque aún realizaba algunas actividades relacionadas con la trompeta como seminarios y cursos magistrales, dentro de los límites que le permitía su delicado estado de salud.
Maurice André falleció en Urrugne, Francia, el 25 de febrero de 2012.
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